Parking en Clermont-Ferrand
Aparcar en Clermont-Ferrand
Clermont-Ferrand es una ciudad pequeña del centro de Francia y capital del departamento del Puy-de-Dôme en la región Auvernia-Ródano-Alpes. Aquí se ha erigido como el destino de referencia para aquellos que quieren visitar Vulcania, el parque de volcanes que se encuentra a tan solo quince quilómetros del centro urbano, pero no solo eso, sino también por su gastronomía con sus cinco quesos con Denominación de Origen Protegida y su patrimonio monumental destacado por estar construido con piedra negra de Volviq.
Parkings públicos en Clermont-Ferrand
Si has venido de visita o vives aquí, pero estás buscando un lugar seguro donde dejar tu coche, ya sea por corta o larga duración, te recomendamos en cualquier caso contratar un espacio de aparcamiento en un parking público. Algunos pueden ser cubiertos, por lo que posiblemente sean zonas vigiladas. Te aconsejamos te informes con antelación, puesto que cada parking tiene sus propias condiciones, formas de cobro y además te permite comparar opciones con calma. A través de Parkimeter, por ejemplo, puedes hacer todo esto y RESERVAR ONLINE de forma rápida y sencilla.
Estacionamiento regulado en Clermont-Ferrand
El aparcamiento se cobra de 9 a 19 horas, excepto los domingos y los días festivos. La tarifa es de 0,50 euros por 24 horas. A partir de las 19:00 horas, es posible pagar el aparcamiento al día siguiente. Con cada pago de estacionamiento, independientemente de la zona tarifaria, el ticket de estacionamiento se incrementa en 20 minutos gratuitos adicionales, independientemente de la duración elegida inicialmente.
Clermont-Ferrand
Como ya antes mencionamos, Clermont-Ferrand es muy pequeña, pero por lo mismo, el objetivo de este turismo, es ofrecerte una experiencia más relajada y desconectar de las grandes ciudad y el estrés que a veces conlleva como París o Marsella. Puedes caminar por su casco histórico sin ninguna presión y tomarte o café en la Plaza Jaude. La ciudad cuenta con varios monumentos importantes, de los que destacaré dos: la basílica románica de Notre-Dame-Du-Port, catalogada en el Patrimonio Mundial de la Unesco, y la catedral gótica, construida con piedra negra de Volvic.